3 de junio de 2011

De la consolación por la poesía


En mecánica cuántica el límite
de una posición, el movimiento lineal
de una horquilla no sujeta tu pelo,
por lo que su velocidad implica
que a mayor certeza, tu trayectoria
acaba perturbada por el propio sistema
a medir.

No todas llegan a esa conclusión,
en estas y otras palabras hay que decir que
la fuerza con que dos cuerpos se atraen
está sobrevalorada, no es tanta.

La calidad de una aproximación,
por tanto,
se debe a que no existen posiciones
sólo ondas.

Las leyes de la termodinámica
no advierten de los peces abisales,
ni el principito de la incertidumbre
beberá del vino nuevo esta noche,
que no hay consolación en la medida
del desorden que habita en tu sistema
y así nos va.


6 comentarios:

i*- La que canta con Lobos dijo...

Curioso blog, un saludo desde Luz y Penumbra.

wolf dijo...

Me pregunto que significa curioso...¡bienvenida al baile!

Anónimo dijo...

Parece que estamos muy pro-físicos últimamente: unos con fuerzas centrífugas y magnéticas, otros con teorías de universo...¿la fuerza con que dos cuerpos se atraen no es tanta? ¿estás seguro?Yo tengo una teoría basada en la ley de la experiencia: la fuerza con que dos cuerpos se atraen, es directamente proporcional a la fuerza con que esos cuerpos se repelen.

De hecho,cuando entras en el campo magnético sin darte cuenta, todo tu sistema de fuerzas iguales y opuestas trastabilla como un niño aprendiendo a andar, y te das cuenta de que eres más platónico que pragmático.

Un beso causal. Ciel.

wolf dijo...

¿Sí?

Anónimo dijo...

Eso parece, al menos hablo por mi...¿?

wolf dijo...

Debes tener razón. Es que los de letras cuando nos enredamos con las leyes de la termodinámica "trastabillamos como niños" o hacemos travesuras...
Otro beso sin desorden