29 de abril de 2011

La asignatura del llanto

Me desvelo con el llanto sin objeto, torrencial y hermoso de Sofía Loren en una estación, un pueblo ruso  (Los Girasoles, Vittorio de Sica, 1969). A mis insomnios les van bien las bandas sonoras de Mancini. El llanto de Sofía. A mis insomnios les va bien todo menos yo. Les doy zumo de naranja y rosquillas, un par de cigarrillos quizá. Y ahora que ya no lluevo por dentro, que dejo atrás la primavera de mi descontento y sus usos, pienso que la naturaleza es cruel con sus hijos más dilectos. Mientras le miro el ombligo a mi insomnio, le tapo con una mantita y espero que parta el tren.
Hoy que es mañana, he cumplido con la asignatura del llanto.
Aquí la tienen, es ésta:

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Llevo varias noches dando vueltas en la cama, pero sin BSO. ¿De qué película es ese llanto? La escena me ha sido muy familiar, de hecho parece que yo misma esperaba en la estación.

De llantos cercanos tomamos apuntes...

Ciel.

wolf dijo...

Si Ciel, es lo que parece, Los Girasoles de
Vittorio. Algún día deberíamos buscarnos en un faro
cerca del fin de la tierra, como proponía un amigo común.
Sin mencionar nombres ni faros. Viene lluvia pero el jardín
tiene rosas y jazmines, no se entera...

Anónimo dijo...

Habrá que despertar al jardín con un grito mojado. También las flores son asiduas de paraguas y plásticos,no hay bancos para leer bajo el cielo gris, ni palabras que no se mojen: las he buscado por toda la tierra, quizá si nos encontramos al final de ella, podamos leerlas juntos aquellos que adoramos el abrazo de las nubes, los que creemos que la luvia no tiene copyright.

No sólo las flores: puedes gritar girando con los brazos extendidos a este mundo de sordos, y nadie se entera de nada...